La salida del default
Antes de cerrar el canje, el país planea endeudarse en el exterior
Boudou buscará que la tasa de interés del nuevo bono, que se emitiría este año, sea de un dígito
Martín Kanenguiser LA NACION
El ministro de Economía, Amado Boudou, afirmó ayer que el Gobierno buscará volver a los mercados internacionales voluntarios de deuda con una tasa de interés de un dígito antes de cerrar el canje con los bonistas en default, que podría culminar antes de fin de año.
En una entrevista con LA NACION en su despacho, junto con el secretario de Finanzas, Hernán Lorenzino, y otros colaboradores, el ministro afirmó que, más allá de la oferta anunciada anteayer, el Gobierno tiene un plan que le permitirá en 2010 utilizar menos recursos del presupuesto y aprovechar el crédito externo para financiar obras. Sería la primera emisión internacional tras el default de 2001. Además, dijo que el acuerdo para la deuda de US$ 6500 millones al Club de París también puede "encaminarse" este año.
Aunque no quiso avanzar en los detalles de la oferta, personas allegadas a él ratificaron que habrá un premio para los inversores minoristas, que el bono que se les dará a los que se adhieran al canje será en dólares a unos 25 años y que el pago de intereses impagos por el período 2005-2009 será con un título a 7 años, similar al que aportarán los inversores como dinero fresco.
-¿Cuándo se puede cerrar el canje anunciado?
-Tenemos la determinación de concluir antes de fin de año. Igualmente, hay plazos que no manejamos, como la registración en Italia, Alemania, Nueva York, Londres, Luxemburgo y tal vez Japón. Y está el plazo por el envío al Congreso de la ley cerrojo.
-¿El envío de la suspensión de la ley cerrojo busca evitar discusiones sobre la legitimidad de la oferta?
-Es para darle más fortaleza institucional a este canje, que profundiza una política que arrancó en 2005. Hubo una presidencia que con toda irresponsabilidad marcó con bombos y platillos el default. En cambio, en 2005 se llamó a los acreedores para avanzar en un acuerdo que los satisficiera y que, a la vez, asegurara el crecimiento del país. Ahora, con este canje, profundizamos este camino.
-Pese a este elogio del canje de 2005, el ex ministro Lavagna criticó esta oferta porque dice que no hay un plan detrás y porque aumenta la deuda.
-Yo no voy a cambiar mi opinión por esa crítica: esa oferta estuvo bien diseñada y fue exitosa, pero a veces da pena cuando se confunden argumentos técnicos con políticos o con vedettismo. A aquella buena operación le sumamos ahora la creatividad de los fondos frescos para nuestro país -con una cifra de US$ 1000 millones- y no vamos a pagar comisiones, a diferencia de lo que pasó en esa operación.
Lorenzino: -La relación deuda-PBI entre 2003-2005 superaba el 150 por ciento y ahora es inferior al 50 por ciento, por lo que la situación es diferente. Además, este canje mejora el perfil de la deuda.
-¿Y la crítica sobre la falta de un plan, más allá de la oferta?
Boudou: -Sí que hay un plan, porque frente a la crisis internacional se tomaron diversas medidas con varios ministerios en conjunto que permitió que tomemos medidas para poder sortear la crisis en forma bastante diferente que otros países. Es verdad que el superávit cayó, pero fue porque la crisis externa hizo bajar la recaudación y por una política consistente contracíclica para sostener el empleo, el gasto público e incrementar las transferencias a las provincias un 80 por ciento.
-Pero para varios analistas, esa debilidad fiscal es la que apuró al Gobierno a definir este anuncio.
-No; esta es una decisión de lógica económica: estamos convencidos de que el aumento del gasto de capitales debe financiarse con crédito, no con recursos corrientes, como ocurrió este año.
-¿La nueva emisión llegaría después del canje?
-[Interrumpe.] Puede ser en medio del canje, gracias al esfuerzo y la creatividad de la Secretaría de Finanzas.
-¿Será un bono a 10 años?
-Queremos un menú de opciones, de corto plazo y de mediano y largo plazo.
-O sea que pueden colocar una letra corta voluntaria a los bancos...
-Es una alternativa.
-¿La colocación de un nuevo bono será cuando se pague un dígito en la tasa de interés?
-Ese es nuestro deseo; somos realistas, pero podemos lograrlo.
-¿Cuánto más pueden subir los bonos después del anuncio?
Lorenzino: -El avance en la hoja de ruta permitirá que los precios reflejen mejor los fundamentos del país. Al menos, los bonos cortos ya no rinden más que los largos, como ocurría hace unos meses.
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