Mundial de Básquetbol
Con mentalidad de superhéroes
La Generación Dorada nuevamente mostró su mística para marcar la diferencia sobre Brasil y obtener un triunfo con sabor a hazaña en Turquía. ESTAMBUL. En lugar de analizar el monumental triunfo ante Brasil, sería preferible contar las emociones que un argentino siente en la cancha al verlos trabajar como orfebres para sacar a flote un compromiso extremadamente difícil. Contar cómo manejan situaciones, cómo calculan todo, cómo se juntan y se dan aliento, o cómo construyen ladrillo a ladrillo y después se aflojan festejando junto a su hinchada.
Es conmovedor y dejan un nudo en la garganta y un lagrimón en las gateras. Imposible algo más perfecto para los sentimientos celestes y blancos que vencer al clásico rival en un momento histórico, bisagra para ambas selecciones, y hacerlo de a poquito, sin que les tiemble el pulso, comiéndole la cabeza y con una mentalidad ganadora aplastante, de superhéroes.
Todo lo hacen con extremo sacrificio y a corazón abierto, pero también con inteligencia, astucia, con la seguridad y la calma de un cirujano. Ellos transmiten la sensación de que, como sea, van a ganar. Y el adversario lo olfatea y les teme.
Así fue la colosal victoria frente a los brasileños, por 93-89. Un éxito que clasificó a la Argentina para medirse con Lituania, el jueves a las 15, por un pasaje a las semifinales.
Parece increíble escribir esto y referirse a un equipo maltrecho, con ausencias, pero lleno de alquimia, que ayer volvió a reinventarse hasta contagiar esa fortaleza anímica y mental a Pancho Jasen, que no había lucido aún y ayer, en la parada más difícil, apareció con autoridad, anotando 15 puntos, con varios triples decisivos... Si eso no es mística.
El juego fue tal cual se lo esperaba, parejo, de alta tensión, alternándose la supremacía en el tanteador por no más de 7 puntos, friccionado, muy táctico y emocionante. Gol a gol, triple a triple, con fallos discutidos, con broncas y nervios.
Un tremendo partido, de esos que atrapan y desgastan de verlo y sentirlo nomás. Lo inesperado fue el alto goleo, pero tuvo que ver con la tremenda eficacia en triples de ambos: 11 de 18 los de Hernández (61%) y 12 de 24 los de Magnano (50%).
Otra vez la Generación Dorada, como ocurre siempre en los torneos importantes, le puso el pie encima al intento de resurgimiento de los brasileños. Ni Rubén Magnano pudo. La propuesta era hacer un gran Mundial para tener aspiraciones de llegar a los Juegos Olímpicos de 2012, pero otra vez un mazazo psicológico los frenó y los expulsó de un Mundial.
Si bien el base Huertas complicó mucho a Prigioni y anotó demasiados puntos, los jugadores argentinos explicaron que fue una cuestión estratégica, planeada. La propuesta era que no convirtieran los internos Tiago y Varejao, que no jugara el resto. Y salió muy bien, sin duda.
El mejor momento argentino (43-38) con un Delfino impecable, continuó con el peor (46-53). Un parcial en contra de 15-3 se sobrellevó con buen ánimo para arrancar 66 iguales el último cuarto.
Volvió Leandrinho, cargado de faltas pero convencido de ser el salvador. Metió dos triples "desde la tribuna"; la Argentina contestó con dos de Jasen y uno de Leo Gutiérrez, para dejar en claro que Leandrinho no tiene "chapa" todavía como para ganar de prepo un partido.
Fue el nudo del juego. El momento psicológico decisivo. De allí en más ese asesino serial de la zona pintada que es Scola ametralló a gusto, desde todas las distancias, ángulos y condiciones, con seguridad y convicción.
La Argentina cerró bien el juego y le puso un moño al bolso que regresa a Brasil. Otro éxito con gusto a hazaña, con el sello de la Generación Dorada, determinante y para emocionar a todos, como casi siempre sucede con este equipo.
DIXIT "Me dio un poco de bronca que el jugador que yo defendí hiciera 32 puntos, pero había que respetar las reglas a morir"
Pablo Prigioni
"Realizamos un gran partido, inteligente. ver a los suplentes jugar y alentar con esa intensidad es muy motivante. Prigioni necesita descansar un rato, pero a Scola no puedo sacarlo ni dos minutos. Ellos dos son el ejemplo".
Sergio Hernández
LITUANIA SUFRIO, PERO ELIMINO A CHINA
Con una gran actuación de Linas Kleiza (30 puntos), Lituania venció 78-67 a China y avanzó a los cuartos de final del Mundial de Turquía, donde se enfrentará mañana con la Argentina. El equipo lituano sufrió en el primer cuarto, cuando se vio superado por China, aunque luego revirtió la situación y pudo imponer su ventaja sobre la irregular selección asiática.
Por Miguel Romano Enviado especial
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