Internacionales
Movilizaciones, protestas y violencia generalizada en varios países árabes
Al menos 6 muertos se registraron en Libia durante el día de marcha contra el régimen de Kadafi, al frente del gobierno durante 40 años; en Bahrein ya cuentan 5 fallecidos en las últimas horas. TRIPOLI.- Las protestas convocadas hoy contra el régimen del líder libio, Muamar Kadafi, causaron al menos 6 muertos en la ciudad de Bengasi, según los medios opositores del exterior del país, aunque las autoridades libias han reconocido sólo dos fallecidos.
En un país tremendamente hermético como Libia resulta muy difícil confirmar el número de víctimas producidas por las protestas, que fueron especialmente violentas en Bengasi, la segunda ciudad en el este del país, y en Al Baida, casi en la frontera con Egipto.
Según "Al Youm" y "Al Manara", dos medios electrónicos opositores libios con sede en Londres, en Bengasi los enfrentamientos entre manifestantes y las fuerzas policiales causaron 6 muertos y 35 heridos.
En Al Baida, dos manifestantes murieron y varios resultaron heridos ayer, afirmó por su parte la edición digital del diario libio "Quryna", perteneciente al grupo de medios de comunicación de Seif el Islam, uno de los hijos de Gadafi.
Este diario, el único del interior del país que ha proporcionado información sobre algunas protestas, indicó que las autoridades libias cesaron hoy al responsable local de seguridad por la muerte de esas dos personas.
Sin embargo, "Quryna" afirmó que los incidentes se produjeron debido a las protestas de los propietarios de varias tiendas del mercado de la ciudad después de que la Policía local cerrase algunas de ellas debido a "un procedimiento administrativo habitual".
La misma fuente informó también de que en Alzentan, a 145 kilómetros al suroeste de Trípoli, se produjeron violentos enfrentamientos en los que resultó incendiada una comisaría de Policía, el tribunal de la ciudad, la sede de la Guardia de Seguridad y un local de los "comités revolucionarios".
En Trípoli centenares de personas se concentraron en la plaza Verde, en el centro de la ciudad, en apoyo a Gadafi al tiempo que decenas de automóviles con banderas verdes, símbolo del sistema que rige en el país, circulaban por la capital, según constató. En la plaza Verde las redes sociales de internet habían convocado precisamente una protesta contra el régimen, que no tuvo lugar.
Túnez. El ex presidente tunecino, Zine al-Abidine Ben Ali, se encuentra en estado de coma en un hospital en Arabia Saudita, anunció una fuente saudita. Ben Ali, de 74 años, fue derrocado en una revuelta popular el mes pasado y huyó de Túnez luego de 23 años en el poder. Ha estado exiliado en Arabia Saudita desde entonces.
"El está en una grave condición", dijo la fuente, que habló bajo anonimato y señaló que no estaba seguro de en qué hospital se encontraba el ex mandatario. El derrocamiento de Ben Ali desató una serie de levantamientos populares que han sacudido al mundo árabe e inspirado las protestas que forzaron a la salida del presidente de Egipto, Hosni Mubarak.
Egipto. La secretaria de Estado de EE.UU., Hillary Clinton, anunció hoy que destinará 150 millones de dólares a apoyar la transición en Egipto, al tiempo que indicó que dos funcionarios de alto rango viajarán la próxima semana a El Cairo.
En declaraciones a la prensa después de informar a miembros del Senado sobre los últimos acontecimientos en Oriente Medio, Clinton adelantó que David Lipton, un asesor de la Casa Blanca para asuntos económicos internacionales, y el subsecretario para Asuntos Políticos, William Burns, viajarán la próxima semana a El Cairo para analizar con el gobierno egipcio sus necesidades y prioridades.
Clinton, quien acudió junto con Burns y el segundo general de más rango en el Estado Mayor Conjunto, James E. Cartwright, al Capitolio para dar a los legisladores información clasificada de su respuesta y los acontecimientos en Egipto y en el Oriente Medio más amplio, explicó que los fondos servirán para respaldar "la transición en Egipto y la recuperación económica" del país árabe.
Bahrein. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se opone al uso de la violencia por el gobierno de Bahréin contra los manifestantes pacíficos, indicó su portavoz este jueves tras las protestas que irrumpieron en ese país.
Obama "considera que debemos oponernos al uso de la violencia por el gobierno de Bahréin", señaló el portavoz de la Casa Blanca Jay Carney, y añadió que el mandatario estadounidense rechaza cualquier tipo de represión contra manifestaciones pacíficas en la región.
Según datos oficiales, al menos 3 personas murieron y 195 resultaron heridas tras un asalto en la noche del miércoles de las fuerzas del orden contra manifestantes reunidos en una plaza de la capital de Bahréin, un pequeño reino del Golfo Pérsico de mayoría chiita y gobernado por una dinastía sunita. Dos personas más fallecieron por disparos de la policía durante las protestas registradas en el país árabe el lunes y el martes.
El Ejército asumió hoy el control de la situación y envió tanques a la capital de Bahréin, Manama, después de que nuevos enfrentamientos entre manifestantes pacíficos y las fuerzas de seguridad caldearan aún más el ambiente de protesta que ya causó al menos cinco muertos.
Un portavoz militar justificó la intervención del Ejército en la capital con que ésta sirve a la seguridad de los ciudadanos. Advirtió contra manifestaciones masivas en nudos neurálgicos en el centro de Manama.
Horas antes un funcionario del Ministerio de Asuntos Exteriores y un popular activista pro derechos humanos renunciaron en protesta por la represión policial contra manifestantes que se saldó con cinco muertos, oficialmente tres, la noche pasada, según aseguraron hoy testigos y opositores.
El ministro de Estado para Asuntos Exteriores, Nasar al Baharna, así como Abdullah Al Durazi, que habían recibido el encargo de crear un comité de reconciliación nacional, dimitieron de sus cargos después de que las fuerzas de seguridad cargaran contra manifestantes en el reino árabe.
También el jeque Ali Salman, presidente de la sociedad chiita Wifak, condenó la actuación de la policía, que desalojó con violencia la plaza central de Manama mientras la mayoría de los aproximadamente 6000 manifestantes estaban dormidos.
"Así no se puede tratar a manifestantes pacíficos", dijo Salman en una entrevista concedida a la emisora televisiva Al Yazira. Su organización, que ocupa 18 de los 40 escaños en el Parlamento, apoya a los manifestantes. El jeque subrayó, sin embargo, que Wifak no busca la caída de la monarquía, sino que reclama reformas políticas.
La policía rodeó durante la noche la plaza de La Perla, donde muchos opositores y críticos con el régimen habían acampado, lanzó gases lacrimógenos y abrió fuego sin previa advertencia a los allí presentes para que se dispersaran.
Agencias EFE, AP y AFP
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