Homicidio en Corrientes
En un descampado mataron a un joven de un balazo en la espalda
 Tenía 19 años y sus amigos lo vieron por última vez con vida acompañado de una chica. Su cuerpo estaba tirado entre pastizales, con el pantalón y el slip bajos a la altura de las rodillas. El disparo salió por el abdomen. Intensa investigación por parte de la Policía. El cadáver de un joven de 19 años fue encontrado ayer tirado en un descampado de la zona Sur de la capital de Corrientes, con un balazo en la espalda disparado desde corta distancia, según estiman los encargados de la investigación que trabajan en procura de identificar y detener al o los homicidas.
La víctima fue identificada como Jonatan Héctor Lugo, domiciliado en calle Cabo de Hornos al 5000, a pocas cuadras de la escena del crimen.
La Policía llegó hasta el cadáver de Lugo después de recibir insistentes llamadas al número de emergencias 911, por parte de un testigo al que pretendían ubicar.
Tales comunicaciones sucedieron entre las 7 y las 7:30 aproximadamente.
Esa persona indicó con lujo de detalles el lugar exacto donde el muchacho había caído: un terreno baldío de altos pastizales situado frente al complejo habitacional 100 Viviendas del barrio 3 de Abril y lindero al predio abandonado de la ex fábrica de tubos Colono.
Fuentes cercanas al caso le dijeron a época que el cuerpo estaba recostado sobre su lado derecho, con la cara hacia arriba y las piernas flexionadas. Tenía el pantalón de jeans y la ropa interior bajos hasta casi las rodillas. En la parte superior vestía una remera y un buzo y además llevaba puestas sus zapatillas rojas.
En principio no habría evidencias concretas de que lo hayan atacado con fines de robo, aunque la probabilidad de ese móvil seguía en pie.
El impacto del proyectil fue a mitad de la zona lumbar y el orificio de salida junto al ombligo y se presume que el arma de fuego utilizada sería un revólver, posiblemente de calibre 32.
Efectivos de la comisaría Duodécima y de la Dirección de Investigación Criminal, junto al fiscal Buenaventura Duarte, comenzaron con la pesquisa que a la hora tuvo sus primeros demorados.
Personas que habitan la barriada mencionaron escuchar al menos dos detonaciones, aunque nadie precisó haber visto al responsable de los disparos.
Lugo y sus amigos participaron durante la noche de una reunión en una vivienda del barrio Santa Marta.
Por el testimonio de un conocido del muchacho, la Policía supo que éste se alejó acompañado de una mujer llamada Raquel. Se trata de una chica que viviría en el barrio Iberá, quien a media mañana fue ubicada e interrogada por los investigadores.
Durante todo el día hubo movimiento de efectivos con el afán de esclarecer el crimen cubierto de un manto de misterio. Incluso hasta debió intervenir la Dirección de Investigación de Delitos Complejos.
Todo dolor Con el paso de los minutos la noticia sobre la muerte del joven fue llegando a oído de sus familiares y allegados, quienes no tardaron demasiado en llegar hasta el descampado donde los peritos realizaban trabajos preliminares en búsqueda de pruebas.
Una hermana adolescente, una tía y luego la madre de la víctima protagonizaron fuertes escenas de dolor.
¿Respuesta tardía? Respecto a este caso trascendieron versiones acerca de la presunta tardanza por parte de la Fuerza de seguridad en acudir en respuesta a los avisos telefónicos que hablaban de la presencia del joven baleado. “Cuando llamaron parece que todavía estaba vivo y hasta que llegaron pasó media hora”, dijo una fuente extraoficial. Fuente: época -
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