Estadísticas polémicas
El FMI dice que se reemplazará el índice de precios del Indec
Tras la visita de una misión del organismo. Difundió un informe que vuelve a objetar el IPC y afirma que el Gobierno va a sustituirlo por otro nacional. WASHINGTON.- No sólo volvió ayer el Fondo Monetario Internacional (FMI) a cuestionar el índice oficial de inflación en la Argentina, sino que, en un giro respecto de lo que viene anunciando el Gobierno, afirmó que ese indicador será "reemplazado", en el futuro, por uno nuevo.
Aludió así el organismo al nuevo indicador, de alcance nacional, en cuya elaboración colaboró hasta ayer con el Instituto Oficial de Estadística y Censos (Indec), en una tarea de "asesoramiento" gestionada, en noviembre pasado, por los ministros Héctor Timerman y Amado Boudou.
Ayer, tras dos misiones técnicas y visitas por el interior, el FMI dio por terminada esa colaboración y dio cuenta de la entrega de un reporte a las autoridades argentinas con "recomendaciones específicas sobre el diseño y la metodología de desarrollo de un nuevo IPC nacional".
Lo hizo en forma coincidente con un nuevo embate contra las cifras oficiales en materia de costo de vida (IPC) y de crecimiento de la economía, expresado en los primeros capítulos del Panorama Económico Mundial (WEO, según su sigla en inglés) dado a conocer ayer en esta ciudad.
Como contracara, el WEO corrige en sentido alcista las expectativas de crecimiento de la Argentina. Así, frente al 4% que había previsto en mayo pasado, pronostica ahora del doble: 6% para este año y 4,6% para el próximo. "Eso se debe, en buena medida, al efecto rebote de la economía de Brasil.
Es una buena noticia, pero hay que tener cuidado con el recalentamiento", dijo el economista Jorge Decressin, del Departamento de Investigaciones del Fondo.
Tal como viene ocurriendo en los últimos cuatro años, el Panorama Económico Mundial volvió a cuestionar la credibilidad del IPC, pero, con la novedad, esta vez, de que ese indicador será "reemplazado" en el futuro por uno nuevo, de alcance nacional, elaborado por el Indec con la asesoría del Fondo. Esa sola confección, que correrá por cuenta del Gobierno -el FMI sólo asesora-, podría demorar más de un año.
Es un cambio drástico respecto de lo que viene anunciado, hasta ahora, el Ministerio de Economía: que el nuevo indicador conviviría, de algún modo, en el sistema estadístico nacional con el que hasta ahora viene elaborando el Indec. "Las autoridades argentinas han anunciado que están elaborando un índice de precios al consumidor (IPC) nacional para reemplazar al IPC del Gran Buenos Aires actualmente en uso", dice formalmente el informe del FMI.
Al cierre de esta edición, fueron vanos los intentos de La Nacion por obtener precisiones en el organismo. Amado Boudou había sostenido que el IPC, tal como se lo conoce hasta ahora, no dejaría de elaborarse. Ayer, al igual que todo el Gobierno, el ministro se mantuvo en silencio tras conocerse el anuncio del FMI.
La nota se hace eco de las diferencias que existen entre ese indicador y lo que recogen analistas privados, para quienes, dice el Fondo, las mediciones de inflación "han sido considerablemente más altas" que la oficial. "Los analistas privados también opinan que el crecimiento del PBI real fue significativamente inferior a lo indicado en las estimaciones oficiales en 2008 y en 2009, aunque esa diferencia se acotó en 2010", agrega el informe.
De ese modo, y valiéndose de las cifras oficiales, consigna una proyección inflacionaria del 10,2% para este año y del 11,5% para el próximo.
Así, en la perspectiva regional, nuestro país queda segundo en materia de proyección inflacionaria, sólo superado por Venezuela (28%).Brasil, la principal economía en la región, tiene una proyección inflacionaria del 6,3% para este año y del 4,8% para el próximo, así como una evolución del PBI del 4,5% para este año y del 4,1% para el que viene.
En la antesala de su "reunión de primavera", que comenzará pasado mañana, el responsable del informe, Oliver Blanchard, sostuvo que la región "capeó bien la tormenta de la recesión global". Sostuvo, sin embargo, que el riesgo ahora es "enfrentar los desafíos de establecer políticas adecuadas para administrar dos fuertes vientos de cola: altos precios de las commodities y fuertes flujos de capital".
El informe indica que "en los países más grandes de la región, el pronóstico de base señala moderación de los rápidos índices de crecimiento experimentados en 2010". Y aclara que, pese a eso, el "recalentamiento es un riesgo significativo" contra el que se deben tomar precauciones. De hecho, en su conjunto, el organismo revisó de nuevo al alza las perspectivas de crecimiento para América latina y el Caribe, que ahora sitúa en 4,7% para este año.
Silvia Pisani Corresponsal en Estados Unidos
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