El Banco Central no intervino
El dólar volvió a subir
El BCRA evitó liquitar reservas y fomentar la bicicleta financiera. El billete verde es hasta ahora una de las mejores inversiones del verano: les gana a los plazos fijos, a los títulos públicos y a las acciones del MerVal. El dólar subió un centavo y cerró a $ 3,88 en las casas de cambio de la City porteña, cuando fue feriado en Estados Unidos y Brasil y mientras se esperaba que el mercado de cambios pase sin pena ni gloria.
El Banco Central no quiso intervenir para no liquidar reservas ni para fomentar la bicicleta financiera y regalarle un negocio sin riesgos a los bancos. El billete verde hasta ahora es una de las mejores inversiones del verano, le ganó a los plazos fijos, a los títulos públicos y a las acciones del MerVal.
La mayoría de los financistas estimaba que iba a ser una rueda tranquila, sin cambios en el tipo de cambio y con un bajo volumen operado por el feriado en Estados Unidos (Día del Presidente) y en Brasil (por Carnaval). Pero la demanda de pequeños y medianos ahorristas no cesa y la divisa norteamericana trepó un centavo.
Los inversores continúan dolarizando sus carteras para resguardarse de posibles saltos en el tipo de cambio, a pesar de que el Banco Central tiene suficientes reservas como para mantenerlo controlado. En los mercados estiman que las grandes empresas no intervienen porque ya están dolarizadas.
El Banco Central dejó subir el billete verde y no intervino en ningún momento en el mercado de cambio. La mesa de dinero de la entidad estuvo atenta a los distintos movimientos, pero no ingresó ni en el mercado de spot ni en los futuros.
La institución que ahora dirige la economista Mercedes Marcó del Pont no utilizó ninguna de las dos herramientas que tiene para evitar que se devalúe el peso. No liquidó reservas para cumplir con la orden que mandaron de la Quinta de Olivos de cuidarlas como si fueran oro. Ni tampoco operó en los mercados de futuro tal cual lo venía haciendo.
El Central durante la semana pasada les regaló un negocio libre de riesgos a las entidades, al actuar como un asegurador del tipo de cambio. Esta maniobra le permitió al organismo contener el tipo de cambio, a pesar del incremento de la demanda, pero sin perder reservas.
El dólar subió 5 centavos desde que comenzó el año. Fue una de las mejores inversiones y está cerca de alcanzar la cotización más alta desde junio de 2002: $3,95. El 4 de enero la divisa norteamericana cerró a $3,83, y en 45 días otorgó un rendimiento del 1,5%. Mientras que los ahorristas que prefirieron colocar este dinero en un plazo fijo obtuvieron un rendimiento que roza el 1%.
Y aquellos que se arriesgaron a comprar títulos públicos cuando la mayoría se desprendía, perdieron hasta 20%. El Boden 2012 descendió 2,6% desde que comenzó el verano, el Discount en pesos cayó 20,5% y el Bogar 2018 perdió 13 por ciento. Las acciones que integran el índice de acciones líderes MerVal se deslizaron hacia la baja en promedio 4,5% desde que comenzó 2010.
Los títulos de deuda pública experimentaron un rendimiento dispar durante la rueda de ayer. El Boden 2012 trepó 0,97% y el 2014 0,8%. Mientras que el Discount en pesos perdió 1,05% y el Cupón PBI en dólares cayó 4,2%.
Las acciones del MerVal crecieron 0,15%. El papel de Tenaris ganó 0,9% y el del Banco Francés 1,3%. Mientras que los títulos de Siderar y Petrobrás cayeron 1,3 y 0,9 por ciento respectivamente.
El oro recuperó la tendencia al alza durante las últimas semanas ante la incertidumbre sobre la evolución de la economía europea. Ante este escenario, la mayoría de los inversores vuelve a preferir los activos más seguros, que no otorgan un gran rendimiento pero permiten mantener el poder adquisitivo.
La onza se negoció a u$s 1.100,5 contra los 1092,4 del viernes pasado.
Fuente: C de A - |