Amistad sin Fronteras
Emoción, lágrimas y aplausos en la despedida a Nilo y Ana Meri
Un rico almuerzo criollo en el Establecimiento “La Esperanza", en donde los anfitriones, "Pacucho" Batalla y Familia, prepararon el agasajo para despedir a Nilo Silva y su esposa Ana Meri García, que vuelven a su país de origen después de más de 30 años trabajando en la Argentina. “No estaba queriendo él ningún consuelo, tampoco ella, y si ahora lo vimos llorar, es por la nostalgia que ya comienza a sentir cuando se encuentren lejos, pero muy cerca siempre de todos nosotros. Su llanto no es ningún llanto, porque no es de tristeza y dolor, aunque las lágrimas que se derramaron acá, son fruto de un hermoso sentimiento que se llama hermandad”. Ver y escuchar a un amigo expresar su realidad en palabras claras y emotivas, con ese acento que más de tres décadas en otro país que no era el suyo, no pudieron cambiar, se te hacía un nudo en todo el cuerpo, porque fueron palabras que salían de muy adentro, reflejando su honestidad, su sencillez y su humildad.
Nosotros, todos, con Nilo y Meri incluidos, ya comenzamos a sufrir ese estado o sensación que un escritor portugués la definió como «bem que se padece e mal de que se gosta» (el bien que se padece y el mal que se disfruta), encerrado con emoción en una sola palabra llamada “Saudades”.
El broche de oro de esta reunión que tuvo varios ingredientes como lágrimas, risas, música, regalos, aplausos y danzas de ocasión, fue sin duda alguna la prosa inigualable de José Lezcano, la profesionalidad de Marito Perez, quien con su guitarra y el acompañamiento del bombo de Rossana Romero, le dieron el calor necesario interpretando varios temas del folklore nacional.
Gracias Rossana y Pacucho Batalla con parte de su Familia, responsables de la organización por tan emotiva reunión para despedir al amigo Nilo y Meri, con un agasajo criollo en el Establecimiento “La Esperanza”. Un lugar como lo definiera tan bien su anfitriona, que es un espacio de encuentro con amigos, disfrutar de un rico asado, buen vino y una charla siempre amena con el calor humano de quienes visitan este hermoso local campestre de esta querida gente amiga.
Una frase única que quedará siempre en nuestros recuerdos: “ustedes donde vayan les ira bien, porque ustedes son todo lo que está bien" – Rosane Miguens -
- Fotos: Imagen de Prensa - |