De los siete detenidos, tres serían los autores y cuatro los encubridores; en la indagatoria, la joven que tenía el celular de una de las víctimas dijo que se lo regaló su novio, uno de los más complicados, y que desconocía su origen; dos de los apresados se negaron a declarar y continúan las indagaciones.

El caso de las turistas francesas asesinadas en Salta, cuya investigación avanzó a pasos agigantados el fin de semana, vive una jornada clave con la indagatoria de los seis sospechosos detenidos este fin de semana en varios operativos, en los que la policía también secuestró la presunta arma homicida, un teléfono celular y la cámara fotográfica de las víctimas.

Ya declaró ante el juez Martín Pérez, María Fernanda Cañizares (24), a quien le secuestraron el teléfono celular de una de las francesas. La joven dijo que se lo había regalado su novio, Gustavo Lasi (24), un empleado público que realiza changas como guía turístico, de quien se sospecha que participó en la violación y crimen de las jóvenes, junto a otras dos personas, y que también fue detenido el sábado.

Según el abogado defensor de los hermanos Cañizares, Santiago Pedroza, Fernanda contó en la indagatoria que el celular se lo había regalado su novio el fin de semana posterior al crimen. No precisó la fecha, pero "pudo haber sido entre el 15 a la noche y el 17".

La joven agregó que su novio le había manifestado que había adquirido el celular a un amigo por $150 y que la cámara de fotos la había encontrado olvidada en un bar.

"María Fernanda le explicó al juez que ella nunca sospechó sobre el origen de esos objetos-contó Pedroza. Por eso le puso el chip de su viejo celular al nuevo teléfono, ya que el de ella estaba roto."

En tanto, su hermano Federico (23), que tenía en su poder la cámara de fotos de las víctimas y que, según había afirmado, se la vendió Laxi por 150 pesos, se negó a declarar por consejo de su abogado. "Al celular y la cámara los tenía María Fernanda. Federico no está involucrado. Y como no está acusado de nada, le aconsejé no declarar", manifestó Pedroza.

Fuentes judiciales informaron que se espera que sea indagado Omar Darío Ramos (47), después de que Lasi, uno de los más complicados, adujera sentirse mal para interrumpir su declaración. Ramos es guía de Puma Expedition, la empresa que explota comercialmente la reserva natural Quebrada de San Lorenzo, donde fueron encontrados los cuerpos de Cassandre Bouvier (29) y Houria Moumni (24).

Los demás apresados son: el padre de Gustavo, Walter Orlando Lasi (42); Santos Clemente Vera (37), cuidador del country Buena Vista, cercano a la escena del crimen, y Daniel Octavio Vilte Lasi, el albañil que está detenido desde el martes pasado y que, según cuatro testigos, habría querido vender un arma calibre 22, el mismo que se utilizó para ultimar a las turistas. Se supo, además, que Vilte es primo de Gustavo Lasi.

La principal línea investigativa cree que Vilte, Vera y Lasi serían los que violaron y mataron a las francesas. De hecho, según fuentes judiciales, hay fuertes sospechas de que fue Vilte quien disparó y que por eso se habría querido deshacer del arma calibre 22, como indicaron otros testigos. Lasi sería un aspirante a policía, y haría changas como guía turístico.

Ramos, los hermanos Cañizares y el Luis Lasi, padre de Gustavo, serían encubridores.

Después de que el magistrado los indague, seguramente habrá más precisiones sobre esta hipótesis. Además, el juez Pérez tendrá diez días para definir la situación procesal de todos los apresados. Por ahora, maneja dos posibles móviles del ataque: la agresión sexual directa como objetivo principal y el robo posterior a los homicidios, y el robo que, ante la resistencia, se transformó en violación y muerte.

Los cuerpos de las turistas fueron hallados el 29 de julio y el primer día hábil de agosto, el juez Pérez ordenó el rastreo y la intervención de un número telefónico, lo que permitió encontrar el hilo conductor de la investigación, que concluyó con la detención de siete personas, según informó el vocero del Poder Judicial de Salta, Marcelo Báez.

Pruebas falsas

Según fuentes del caso, Ramos, el guía de la reserva, intentó desviar la investigación desde un primer momento, "Cuando fueron hallados los cuerpos, guió en forma errónea a la policía por el cerro e inventó una historia de que cuatro turistas cordobeses habían ingresado en la reserva cinco minutos después de Bouvier y Moumni", explicó un vocero de la causa.

"No sólo sembró falsos indicios para desviar la investigación; hacía lo mismo durante los rastrillajes en los que participó junto a la brigada de investigaciones", reveló otra fuente oficial.

Ramos, que declaró en la causa como testigo, el jueves pasado, sostuvo que un empleado de Puma Expeditions de 17 años observó que las turistas francesas habían salido de la reserva a las 17.30, una hora y siete minutos después de haber ingresado. El juez no le creyó, porque el paseo dura por lo menos dos horas.

Por Constanza Longarte | LA NACION
Con la colaboración de Gabriel Di Nicola y Loreley Gaffoglio